España, primer país del mundo en densidad de bares, uno por cada 175 habitantes, 260.000 en total. El bar de pueblo del palillo en la boca, el chato de vino y el suelo empapelado de servilletas, el gastro-bar, el pub, el de manolo, el del tapeo de los viernes, el del café mañanero, el de la estrella michelín...
Y estoy seguro que en la mayoría de ellos se han escuchado las siguientes frases:
- "Chs, oye"
- "¡Eh, tú!"
- "Niño, mi cafelito que llevo prisa"
- "Echa una jarra aquí que este vaso tenía un agujero, JA JA JA JA" (Basta ya de esa gracia, por favor)
- "Invítame a una ¿no?"
- "Vamos (insertar taco tipo hostia o cagondios), que llevo media hora esperando"
Espera espera, que tú, funcionario de turno que por estar tomando un café estás haciendo esperar a alguien en tu trabajo, ¿te enfadas porque el camarero tarda 3 minutos en traerte tu pincho de tortilla?, ¡un poco de sentido!
Es curioso porque el tono y la paciencia baja y sube respectivamente cuando hacemos otro tipo de gestiones.
¿Te imaginas al camarero yendo al médico y que se pusiera a gritar en la consulta "Tú, dame mi receta que tengo prisa", "niña, hostias, llevo dos horas esperando ahí fuera", y después en la farmacia, "oye, ¡podías invitarme al paracetamol joder, que este año ya llevo seis catarros!"
No logro comprender por qué la educación nos va y nos viene dependiendo de la profesión con la que tratemos. Ante todo, son y somos personas, con los mismos sentimientos, el mismo número de manos y pies, y la misma cabeza, sólo tenemos diferente la profesión.
Ay amigos... no hay quien nos entienda; un país en el que 1,6 millones de personas trabajan detrás de la barra, y de empatía y paciencia vamos justitos. Educación es saber que cuando tú sales de tu trabajo, otras muchas personas siguen en el, otros muchos están cansados también, y otros cuantos se desgañitan para que tú tengas ocio. Un poco de calma.
La tríada de la "cultura" en este país siempre ha sido sol, toros y flamenco...; yo añadiría una cuarta marca Spain: la mala educación generalizada hacia la figura del camarero/a. Profesión tan extendida en nuestro país como des-dignificada... ¿por qué? No hay razón.
Me gustaría que todas las personas se pusieran detrás de una barra un mes al menos, para que comprendieran lo que significa aguantar a personas de tan distintos caracteres de manera tan seguida y en muchos casos en diversos estados de embriaguez. No digo que sea la profesión más mártir del mundo, pero sí una de las más comunes al menos en este país y desde luego menos valorada. Si todos se pusieran en esa piel, nadie perdería la educación y buenas formas al hacer algo tan trivial como pedir una caña.
Un poquito de por favor, y de gracias.
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